Lawrence manifestó que cuando hackearon a la compañía Sony Entertainment Network y se descubrió la diferencia de sueldo entre los actores y las actrices de Hollywood dijo estar enfadada con ella misma.
“Fallé en las negociaciones porque me rendí demasiado pronto. No quería pelear por millones de dólares que, francamente, gracias a dos franquicias ya no lo necesite" refiriéndose a The Hunger Games y X-Men.
Gracias a las filtraciones de correos de Sony, la actriz pudo conocer que sus compañeros de reparto masculinos de "American Hustle" cobraban más que ella. "Estaría mintiendo si no dijera que hubo un elemento de querer agradar a los demás que influyó en mi decisión de cerrar el acuerdo sin peleas. No quiero parecer difícil o malcriada. Éste es un elemento de mi personalidad contra el que he estado luchando durante años, y basándome en las estadísticas, creo que no soy la única mujer con este problema. ¿Estamos socialmente condicionadas a comportarnos de esta manera? ¿Tenemos el hábito de intentar expresar nuestras opiniones para no ofender o asustar a los hombres?”.
En el ensayo la actriz se compara con alguno de sus compañeros a la hora de negociar. Indica que Jeremy Renner, Christian Bale y Bradley Cooper lucharon y lograron buenos contratos para ellos mismos. "Estoy segura de que fueron elogiados por ser feroces y buenos negociadores, mientras yo estaba ocupada preocupándome por no parecer una mocosa y no por conseguir lo que me merezco".
La joven fue reiterativa al decir que su reclamo no se debe a que es mujer y se une voces de Sandra Bullock, Patricia Arquette, Meryl Streep, Maggie Gyllenhaal y Rose McGowan en la lucha por la igualdad.
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