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miércoles, 22 de junio de 2016

“Las películas de Marvel son una tontería” —Roland Emmerich.


El director de 'Independence Day: Contraataque' al parecer está en contra del cine de superhéroes, las franquicias y el Hollywood moderno, en general.

El cineasta alemán, se prepara para estrenar Independence Day: Contraataque el 1 de julio, aprovechó en una entrevista con The Guardian (vía The Playlist) para, especialmente, cargar contra el Hollywood moderno. En concreto ha dejado caer su opinión sobre las cintas con superhéroes.

Para empezar considera que la proliferación de franquicias en la Meca del cine está cargándose la creatividad de los directores. 

Contraataque es “una continuación de la historia [de la primera Independence Day], no una secuela”, Emmerich establece un interesante paralelismo: “Cuando miras a la industria de la ropa, ¿dónde han ido a parar las boutiques pequeñas? Sí, siguen ahí, pero quedan muy pocas. Todo lo demás son grandes franquicias, como Gap. Todas las firmas de moda tiene que convertirse en franquicias para sobrevivir”. Deplorando de esta manera el auge del prêt-à-porter, Emmerich confía en que la presente era de superproducciones llegue pronto a su fin: “Ya ocurrió en los 60″, explica. “Todas las producciones de los estudios fracasaron una tras otra, hasta que una producción pequeña como Easy Rider se convirtió en el mayor éxito del año. Eso podría pasar otra vez, pero lo dudo”. Para Emmerich, el público joven está ahora centrado en otras ramas del entretenimiento, como los videojuegos, “y sólo quedarán grandes blockbusters, por un lado, y, con suerte, un puñado de buenas películas para los Oscar”.
“Si te fijas en mis películas, siempre hay un tipo corriente que se convierte en héroe. Pero las películas de Marvel te muestran a gente en uniformes raros corriendo por ahí. No me gusta ver a gente con capa. Me parece una tontería ver a alguien que se pone una capa y vuela. No lo entiendo. Seguramente eso se debe a que crecí en Alemania”.

Finalmente, y aprovechando que la fiesta del Orgullo Gay (28 de junio) está a la vuelta de la esquina, Emmerich aprovecha para defenderse de los ataques recibidos a cuenta de Stonewall, su anterior filme: esta recreación de la revuelta neoyorquina que dio el pistoletazo para la liberación LGBT fue
duramente criticada en su momento por convertir el suceso real, protagonizado en su mayor parte por mujeres transgénero y jóvenes latinos, en una gesta épica para personajes blancos y anglosajones. 

“Eso fue culpa de alguien en internet que vio un tráiler y empezó a acusarme de blanquear [whitewash] la historia”, aduce el director. “Stonewall fue cosa de gente blanca, sinceramente, pero ya nadie quiere escuchar eso”.

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